viernes, 25 de junio de 2010

Manuel Zelaya se reúne con el Colectivo Nuestroamericano Alí Primera en un hotel de la ciudad de Buenos Aires.

Encuentro de Manuel Zelaya con colectivo CNAP


Miembros del Colectivo Nuestroamericano Alí Primera (CNAP), se reunieron con el presidente de Honduras Manuel Zelaya en un hotel de la ciudad de Buenos Aires. El Presidente Zelaya fue invitado por la presidenta argentina Cristina Fernández para participar de la celebración del Bicentenario. Los miembros del CNAP reflexionaron sobre los hechos que originaron el golpe de estado que precipitó su salida del gobierno. Por su parte Manuel Zelaya recordó al héroe centroamericano Francisco Morazán y contó un poco de su historia:
Este pensador y visionario nuestroamericano intentó transformar a Centroamérica en una nación grande y progresista, promulgando grandes reformas en la educación, la libertad de prensa y de culto, entre otras. Pero la oligarquía con ayuda de algunos traidores, facilitaron su captura y lo condenaron a morir en el paredón de fusilamiento. En ese terrible momento de derrota Morazán tampoco bajó la mirada y solicitó el mando de la escolta para dirigir él mismo su fusilamiento. Con su levita negra abierta y con una voz inalterada, pide que preparen las armas y apunten hacia su pecho. Al percatarse de que algunos fusileros cerraban sus ojos y apuntaban hacia otro lado, les exige que corrijan la puntería y da la orden de: ¡fuego! Francisco Morazán se convirtió en un mártir y un símbolo de nuestra Patria Grande, ofrendando su vida para preservar la unión.
El Presidente Zelaya realiza en la actualidad gestiones para la integración de Honduras a la comunidad internacional. Sin embargo, lo que él llama el “plan de reconciliación” no ha sido del todo bien recibido, pues algunos gobiernos, incluyendo el del presidente Hugo Chávez, mantienen con fuerza la decisión de no reconocer el gobierno de Porfirio Lobo, a menos que se le permita al presidente Zelaya volver a Honduras y reiniciar su actividad política.

MORAZÁN

Alta es la noche y Morazán vigila.
Es hoy, ayer, mañana? Tú lo sabes.

Cinta central, América Angostura
que los golpes azules de dos mares
fueron haciendo, levantando en vilo
cordilleras y plumas de esmeralda:
territorio, unidad, delgada diosa
nacida en el combate de la espuma.

Te desmoronan hijos y gusanos,
se extienden sobre ti las alimañas
y una tenaza te arrebata el sueño
y un puñal con tu sangre te salpica
mientras se despedaza tu estandarte.

Alta es la noche y Morazán vigila.

Ya viene el tigre enarbolando un hacha.
Vienen a devorarte las entrañas.
Vienen a dividir la estrella.
Vienen,
pequeña América olorosa,
a clavarte en la cruz, a desollarte,
a tumbar el metal de tu bandera.

Alta es la noche y Morazán vigila.

Invasores llenaron tu morada.
Y te partieron como fruta muerta,
y otros sellaron sobre tus espaldas
los dientes de una estirpe sanguinaria,
y otros te saquearon en los puertos
cargando sangre sobre tus dolores.

Es hoy, ayer, mañana? Tú lo sabes.

Hermanos, amanece. (Y Morazán vigila.)

Pablo Neruda